3 Claves para gestionar el cambio
Si algo nos define como especie en los últimos tiempos es que somos nosotros y nuestras circunstancias.
Esas circunstancias no son nosotros, están fuera de nuestro alcance y por tanto no podemos pretender modificarlas.
Además, las circunstancias suelen ser el primer eslabón del cambio en la vida de cualquier persona. Cuando nuestras circunstancias cambian nosotros sentimos la necesidad de adaptar, revisar, reconducir o mantenernos ajenos.
El caso es que si lo que queremos es entender y gestionar los cambios de la manera más sencilla y eficaz para nuestras vidas tenemos que partir de la base de que no siempre podemos adelantarnos a las circunstancias y que la gran mayoría de las veces el entorno es quien marca la agilidad que debemos tener para cambiar.
Cuanto más variables existan en el entorno, más rápidos serán los cambios en las circunstancias que nos rodean y más deberemos de aprender a adaptarnos a esos cambios.
Así que, manos a la obra con las tres claves
1.- Aceptación: Aceptar que las circunstancias nos son ajenas y que no podemos modificarlas en un porcentaje muy elevado de los casos y en un porcentaje muy elevado de las variables. Es decir, lo que viene siendo que son lentejas.
Aceptar supone que una vez que conoces lo que hay no te dejes arrastrar de manera innecesaria por la ira, la frustración o la desesperanza porque eso supone perder tu energía en cosas que no te llevan a ningún lado.
Cuanto antes aceptes antes podrás pasar al siguiente escalón
2.-Comprender: Comprender supone entender lo máximo posible que tienes en esas circunstancias. En el momento presente que escenario se me presenta.
Comprender, que no es lo mismo que saber de donde viene el “problema” ni a donde va, supones tan solo diseccionar las circunstancias de la manera más práctica posible para familiarizarte con lo que hay.
Y Por último con una energía neutra, que viene de la aceptación y unos datos claros que vienen de la comprensión hacemos lo único que podemos hacer.
3.- Saber que parte de todo esto aun depende de ti u pasar a la acción. La gran mayoría de las veces es tanto como decir que lo único que puedes hacer es decidir que actitud tomas para enfrentarte a las circunstancias que tienes.
Desde ahí sentirás muchísima más paz porque entenderás que pase lo que pase fuera, hay algo que nadie puede nunca decidir por ti y es saber como quieres integrar en tu vida las circunstancias en las que te ha tocado vivirla.